28 jun 2024

El consumo de bebidas energéticas está aumentando a nivel mundial, al tiempo que aumentan las evidencias y la preocupación sobre los posibles riesgos para la salud.

En Cantabria, según los datos de la Encuesta ESTUDES:
• Un 46,6% de adolescentes entre 14 y 18 años ha consumido alguna de estas bebidas en el último mes, cifra similar a la registrada a nivel nacional.
• El consumo es más frecuente en chicos: 52,5% frente a 40,5%.
• Atendiendo a la edad, vemos que la mayor prevalencia se da entre el alumnado de 18 años (51,3%).
• Es especialmente preocupante el uso de este tipo de bebidas con alcohol. Un 21,8% de personas entre 14 y 18 años las han consumido.

La definición de estos productos no está recogida específicamente en la normativa. Su presencia en supermercados, tiendas de golosinas, bazares y otro tipo de establecimientos favorece la normalización de su consumo, haciendo que lleguen más fácilmente a menores de edad,
a pesar de que existe evidencia sobre los riesgos para la salud asociados a tomar gran cantidad de cafeína. Preocupa especialmente su consumo mezcladas con alcohol, enmascarando los efectos de este y favoreciendo las conductas de riesgo.

Todas las investigaciones coinciden en desaconsejar el consumo de bebidas energéticas a:
• Menores de edad
• Mujeres embarazadas y en periodo de lactancia
• Personas con patologías cardíacas, trastornos neurológicos o sensibles a la cafeína