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06 nov 2020

Sanidad inicia la cuarta ronda del estudio de seroprevalencia para estimar el total de población infectada por COVID-19

 

Hoy se ha comenzado a citar por teléfono al mismo grupo de participantes que en las rondas anteriores para investigar también la duración de los anticuerpos en las personas infectadas en la primera onda epidémica

Santander - 06.11.2020

El Servicio Cántabro de Salud (SCS) ha comenzado hoy la citación telefónica a los participantes de la cuarta ronda del estudio de seroprevalencia que servirá para estimar las personas que se han infectado en Cantabria de COVID-19. El trabajo de campo, propiamente dicho, tendrá lugar en toda la región a partir del 16 de noviembre.

Este Estudio Nacional de sero-Epidemiología (ENE-COVID) se realizará al mismo grupo de participantes que en las rondas anteriores para investigar también la duración de los anticuerpos en las personas que se infectaron en la primera onda epidémica.

Además, los resultados del estudio son claves para determinar la duración de la inmunidad, la aparición de reinfecciones y la evolución de las infecciones asintomáticas. Será de gran utilidad, también, para ajustar las estrategias diagnósticas, mejorar los modelos y sistemas predictivos, y diseñar tácticas de vacunación.

Por eso, desde la administración sanitaria se anima a los seleccionados a participar en este estudio "muy necesario para extrapolar los datos al conjunto de la población de Cantabria y del resto del país", sobre todo de las personas a las que no se ha realizado prueba PCR o aquellas que ni siquiera sospechan haber pasado la infección.

Contagiados de la segunda ola

Los datos que se obtengan de esta ronda servirán también para determinar cuánta población se ha infectado en la segunda ola de coronavirus y estimar el porcentaje de detección del total de pacientes contagiados a través de pruebas diagnósticas de infección activa (PCR y test de antígenos).

A diferencia de en las anteriores fases, en ésta no se realizará extracción de sangre de forma generalizada. Únicamente se solicitará a los participantes que den positivo en anticuerpos (IgG) y a una pequeña muestra aleatoria de los negativos. La muestra extraída a los participantes positivos servirá para cuantificar la presencia de anticuerpos con nuevos test serológicos, de los que no se disponía en las rondas previas.

La puesta en marcha y desarrollo de un estudio de este calibre, en tan corto espacio de tiempo, solo es posible gracias a la colaboración tanto de los seleccionados como de un número importante de profesionales de diferentes ámbitos. Entre estos últimos destacan los profesionales de enfermería de Atención Primaria, que realizan el trabajo de campo en todas sus fases (reclutamiento de participantes, encuestas y toma de muestras), así como los del área de logística y análisis clínicos.

"La implicación de todos ellos contribuye a tener un mayor y mejor conocimiento de la situación de la infección por COVID-19 en todo el país".

En Cantabria, han participado el 82% de las personas seleccionadas inicialmente, es decir 1.768 de las 2.329 previstas, si bien únicamente se pudo contactar con 2.156. del total de personas participantes, el 91% ha proporcionado al menos una muestra de sangre. Además, El 80% de las personas que han colaborado en ENE-COVID en Cantabria lo han hecho en las tres ocasiones en las que se les ha invitado.

Estudio único en el mundo

España y, por extensión, Cantabria es el único país del mundo que ha calculado el índice de prevalencia en toda la población con este nivel de precisión y rigor.

De hecho, gracias a este análisis, sabemos que, en la primera ola de coronavirus, sólo el 3,2% de la población de Cantabria, es decir, el 10% de los casos confirmados, se había infectado y tenía anticuerpos contra la enfermedad. Esto se debe, en parte, a que entonces se realizaba prueba PCR a pacientes con sintomatología moderada y grave.

El estudio de seroprevalencia permitió también estimar, por primera vez, el riesgo de mortalidad por grupos de edad y sexo, ya que hasta ese momento solo se podía estimar este riesgo en los pacientes diagnosticados por PCR. Además, el estudio cuantificó que un tercio del total de infectados son asintomáticos y conocer su distribución por edad y sexo.